martes, 25 de diciembre de 2018

LA ESPERANZA DE MIS SUEÑOS


LA ESPERANZA DE MIS SUEÑOS

- Nada es más terrible que recibir el castigo de ser ignorado. Puede que esta afirmación tenga otras aristas a explorar. Por ejemplo: Si en algún momento necesitas a alguien para ser feliz, serás su esclavo. No necesitamos a nadie para ser felices, tenemos capacidad endógena para serlo. El hombre es un "Ser Social", Ningún hombre es una isla, es un complemento esencial el otro, pero no como como un axioma "sine qua non" la felicidad no se da.

En ese exabrupto cuasi dogmático que se gastaba Tomy cuando quería provocar, colocó esa ristra  de frases hechas alimentadas por el deseo  de recibir una respuesta estereotipada por parte de Nora, pero no aparecía. El silencio del taconeo sobre la tarima del restaurante en el que habían quedado, golpeaba la mente seducida de aquel hombre por aquella melodía meliflua. Eso si era provocación, de la buena, de las que llegan al estómago, y generan margaritas de colores,  o en el mejor de los casos mariposas que chocan con las paredes de la pasión y la obsesión por el otro. 

Alguien me dijo una vez que en la búsqueda de la felicidad siempre encontramos al "otro". El otro nos cura del ostracismo al que nos arrastra el ego. El otro refleja a modo de espejo algo que tenemos que aprender sobre nosotros. Nos acompaña en el camino, compensa nuestras carencias, y lo más importante: Apoya nuestros sueños. 

Aunque mi "alter ego", también sabía que no se puede ser feliz sin ser dueños de nuestro destino. La mayor parte de nuestra vida está marcada por nuestras decisiones. Apelamos al destino como mecanismo de defensa de nuestras frustraciones, pero en realidad el resultado de nuestra vida, si lo analizamos minuciosamente, está lleno de decisiones equivocadas o no, pero que nos llevan a ser lo que somos. 

Un juego apasionante, aunque a veces puede ser inquietante, es rescatar las historias frustradas por nuestras decisiones, nos llevan a un planteamiento de ficción envuelto en neurosis, que si no lo digerimos nos conduce al final de la vida a un balance vital bastante inclinado hacia la desesperación. Por tanto las historias que no han ocurrido, no dejaron huella, porque no existieron. Pueden existir otras en nuestro presente,  que si deseamos debemos entregarnos a ellas, con el riesgo de que no salgan como esperábamos. 

No podemos controlar todas las variables que afectan al desarrollo de las relaciones, pero sí somos dueños de nuestra actitud; flexible para adaptarnos a los cambios, y viviendo como si fuera el último día de nuestra vida, y aprendiendo como si fueras a vivir para siempre. 

Este constructo en el que situamos la esencia del hombre: "como ser permanentemente insatisfecho", que quiere lo que no tiene y lo que tiene no lo quiere perder, explica el ámbito relacional del ser humano.

Esa silenciosa procesión de golpeteos en la madera con el fino tacón de Nora, que llevaban a Tomy hasta la locura, fue rota súbitamente por una frase súbita de la seductora dama: 

- Si algo pasara: "Te ignoraría como si nunca hubieras formado parte de mi vida. Evitaría verte. En la distancia las cosas se ven de distinta manera"

Nora no sabía muy bien por qué había dicho eso, pero le había salido del alma. Nora había sufrido mucho en su vida, y sabía cuál era su mejor estrategia para no sufrir, pero Tomy no aguantaría ser ignorado por su Nora, su magnífica amiga que le llevó a perder la razón, a recuperar la ilusión, a sentir de nuevo como si nunca antes lo hubiera hecho. Esa amiga que se transformó en su gran amor era la energía que necesitaba ahora para tomar las riendas de su vida.

- Nora; como siempre digo prefiero que me odien a que me ignoren. No soportaría verme rechazado por ti. Pero eso no va a pasar. Bueno como bien dices tú, a todo se acostumbra uno; pero los dos sabemos que nuestra historia tiene mucho de eternidad: "Los dos sabemos que nunca encontraremos a  nadie que nos entienda  mejor, con mutua admiración, pasión, y respeto". Esto no es fácil de encontrar, y más a una determinada edad, el cronómetro del tiempo corre en nuestra contra. No podemos dejar lo de hoy para mañanas, ya quedan menos mañanas. 

Nora sentía que algo estaba cambiando, que los ojos de Tomy se llenaban de energía cuando hablaba del cambio. Un brote pequeño de esperanza comenzó a brotar entre la sequía de la desesperación de ella. 

- Tomy: Te quiero como nunca quise a nadie.

Ella sentía que estaba ante el gran amor de su vida, aquel descubrimiento, le había llevado hasta un mundo nuevo: Un ser que le hacía sentir libre, segura, de nuevo mujer. Esta oportunidad que le había dado la vida, no podía  perderla.

- Tomy; Ya somos mayores; los amaneceres se van reduciendo, y hay que apostar por lo que quieres: Es mejor arrepentirse de lo que has decidido, que no de lo que nunca has llegado a decidir. Piénsalo, pero no puedes ser un títere en manos del miedo. 

- Ya te dije Nora, que nunca volveré a dejarme en las manos del destino; quiero ser el dueño de mi vida, quiero llevar el rumbo de mis sueños, quiero amarte como nadie te ha amado. Quiero que habites en mi vida, y tener una sola vida, en la que seamos los protagonistas de nuestro guión.

Se alejaron en la sombra de la tarde por el camino de la esperanza, cogidos de la mano, y arropados por la pasión de un nuevo día. Todo es deletéreo, efímero: el día, la noche, la guerra, la paz. Pero ellos sabían que la conexión espiritual en la que habían entrado en estos años gozaba ya de la eternidad. Nada se podía hacer estaban condenados a estar unidos para siempre. Cuando el cuerpo ya no exista, las almas de los amantes vivirán por siempre y para siempre, en la eternidad de la historia de los tiempos. 







No hay comentarios:

Publicar un comentario