Un amigo mío me comentó hace poco que la libertad se da en soledad; esto me hizo pensar; todos anhelamos la libertad; puede que la soledad sea el estado perfecto para ejercer la libertad, pero como bien hemos descubierto en este blog, y en nuestras experiencias vitales el ser humano es contradictorio y en ocasiones ambivalente; "quiere lo que no tiene y lo que tiene no lo quiere perder". ¿Por qué si la libertad es un estado buscado?, y mi amigo dice, con mucha razón que se encuentra en la soledad; nos apuntamos a la máxima de que "ningún hombre es una isla"; se completa con el otro; el ser humano es un ser inacabado; son las experiencias con los otros, las que nos hacen crecer, y las que dan sentido a nuestra vida.
Me pregunto sobre la máxima que afirma que sólo el amor os hará libres; donde aparece el otro como complemento substancial que recibe amor, en una dinámica de retroalimentación de uno a otro desde la soledad del cuerpo y el alma, el amor nos lleva hacia al otro, nos completa, y nos hace poner en marcha mediante la empatía y la misericordia la relación de ayuda.
La flor iluminada por un rayo difuso y amarillento, llenó la virtud artística de Gilda; ella llevaba un tiempo enojada; sus enojos eran sistémicos; se extendían por todo su cuerpo y afectaban a todo su entorno, pero la belleza de aquella flor, despertó la esperanza.
- Dejémonos de milongas; la libertad sólo se manifiesta con el amor. Tenemos necesidad de amar, y nos pasamos la vida buscando a nuestro amor, y ahora que lo encontré, lo he dejado escapar, Scarlet- afirmó Gilda buscando la comprensión de su confesora.
- Gilda el no te da lo que tú quieres, no te digo que no te lo pueda dar, que es muy probable que algún día te lo dé, pero hasta ahora no te lo ha dado.
- He repetido mil veces ese mantra, pero ahora que me falta, lo echo tanto de menos que mi corazón no deja de llorar. Si pudiera volverlo a ver, si pudiera dejar de sufrir. Sufro cuando le tengo y sufro si él no está, que complicaciones tiene el ser humano; ¿Qué puedo hacer Scarlet?- preguntó Gilda en tono de misterio, y de absoluta incertidumbre.
- Gilda; déjate llevar y abandona el ego enojado; la verdadera libertad está en el encuentro de dos seres que se aman, que se completan día a día, que viajan cómplices del idioma de la conexión espiritual, no necesitan hablar, cuando hacéis el amor existe una unión substancial de cuerpo y alma, que transforma el corazón solitario en corazón completo, en un estado de felicidad total.
Mientras tanto Bebo; y en consonancia con la mujer que le hizo libre, escribía este poema, titulado "Imposible el olvido"
No quiero sufrir queriendo
No quiero sufrir amando,
Quiero vivir siempre cerca,
Siempre te estoy esperando.
Todo eso que yo quiero;
Es lo que pide mi alma.
Deseo tengo de verte,
Pero te pido confianza.
Confianza de que te amo
Confianza, siempre confianza.
Quererte es lo que más quiero
Libertad es confianza.
No quiero ser verso libre.
Prefiero estar en tú cama
Cerca de ti cuando duermo
Vivir contigo sin nada.
Sin nada puedo quererte,
Sin nadie amo y me amas.
No necesitamos nadie.
No necesitamos nada.
Quiero decirte estas cosas
Aunque no me digas nada,
Tengo esa necesidad,
Perdona; ¡se que me amas!.
Podemos perder el tiempo,
Salir y huir con distancia,
Pero eso te perseguirá,
Y aunque sigas sin decir nada;
Me sentaré con paciencia
Esperaré tú perdón,
Lloraré por las mañanas,
buscando a tú corazón;
Y cuando ya te des cuenta
Que no vives sin mi amor
Que no importa lo que digan,
Que es sólo tú corazón:
El que un día, ya hace años
Encontré de sopetón,
Y ya una vez que te tengo;
¡DESCUBRIMOS EL AMOR!
Para Gilda; la única persona que amo, amé, y amaré.
