domingo, 30 de diciembre de 2018

CARTA A MI HIJA

Querida Hija; Te escribo esta carta no para ir de maestro de nada, pues en realidad pienso que estoy en un proceso continuo de aprendizaje que no se acaba nunca. El que se crea que sabe todo, no sabe nada, pues esa creencia conduce al nihilismo más absoluto, que se rebate con el siguiente axioma, que siempre por suerte me acompaño en la vida: " El que cree no saber nada, lo sabe todo", y efectivamente eso es literal. Si te enfrentas a la vida con humildad, y con los ojos del niño que le sorprende el mundo,  uno será un  sabio toda la vida. 

Lo que quiero decir con lo anterior, es que nunca se debe dejar de aprender, y la vida está llena de oportunidades para ello: Un aspecto delicado, por la cantidad de emociones que despliega, es el "sufrimiento inevitable". La vida está llena de cosas que producen emociones positivas fruto de logros, éxitos, cariño, admiración, pero también hay cosas que producen sentimientos desagradables, pero que también son necesarios para poder evolucionar. No se trata de buscar el sufrimiento, eso se denomina "masoquismo", hablo del sufrimiento que  te viene dado, quizás en el momento en el que te creías más feliz: El desamor es uno de ellos, la muerte de una persona querida, que te despidan del trabajo...

Como te decía no voy caer en  lo que una vez leí como "Síndrome del experto", basado en que alguien con la más absoluta insolencia, te dice lo que tienes que hacer. Pues bien yo no voy a hacer eso. Pero si contar mi experiencia, en esto que considero que es el "arte de vivir".

Todos sufrimos mi vida, ese sufrimiento inevitable aparece cuando algo muere, y es entonces en ese proceso de duelo, de recuperación ante un escenario en el que la persona que creías que era el amor de tú vida ya no está, donde te reafirmas más, te haces fuerte, curando las heridas inevitables que supone una ruptura. En esa cura es necesario reinventarse, tomar la energía del sufrimiento y canalizarla en forma de luz que te lleve a afrontar un nuevo capítulo de tu vida, pero ya no eres la misma persona, esa persona que ya no está, dejó un poso en ti, y un aprendizaje que te hará en la próxima relación tener la certeza de que hay cosas que no dependen de ti: No se puede obligar a nadie a querer a nadie, pero si depende de nosotros nuestra actitud ante el dolor, como elemento que hay que incorporar a las armas útiles en la vida. 

Ayuda el asumir cuanto antes que nada es eterno, pero que mientras dura hay que disfrutarlo como si fuera el último día de nuestra vida, pero con la actitud realista de que no durará para siempre, y cuando eso se termine, comenzará una nueva etapa diferente, y probablemente mejor. 

Hay una que a mi me parece importante, y es uno mismo. Nada es más importante que la propia persona, quererse a uno mismo, amarse a uno mismo, constituye el mejor arsenal terapéutico para evitar que nos hagan daño. Si alguien tiene algo que deseamos más que a nosotros mismos, nos convertiremos en sus esclavos.  Si mi felicidad sólo depende del cariño que alguien me dé, dependo de esa persona para ser feliz. Para mí, querida hija, esto es dependencia emocional, no amor. Para poder amar hay que amarse antes a uno mismo. 

El hombre es un ser social, necesita al otro, se construye a través del otro, como decía Frankl: "El ser humano es un ser inacabado", se va completando con la experiencia, y el otro te proporciona una potente retroalimentación y te ayuda en este proceso del autoconocimiento que es el paso previo a aceptar lo que no puedes cambiar. Una importante clave es aceptarte como eres. Todos tenemos puntos fuertes y puntos débiles. Los puntos fuertes es en lo que nos debemos apoyar para caminar con seguridad,  y los puntos débiles nos sirven para asumir que somos humanos y no perfectos, y que algunos de ellos podemos mejorarlos, e igual convertirlos en puntos fuertes. 

Te contaré algo; Pensé en un momento de mi vida que era una persona antipática y que la gente no quería relacionarse conmigo. Era una leyenda que mi mente repetía continuamente, y que determinaba mi conducta. Un día  hicimos un ejercicio con un grupo de conocidos que consistía en escribir en un papel con quien nos gustaría irnos de copas. Mi sorpresa más absoluta fue cuando  6 de las 10 personas del grupo me escogieron a mi. Esta batallita te la cuento para que veas, que a veces lo que creemos que es un punto débil, solo es una falsa creencia. 

Vivir sin sufrimiento no es posible. Como dice Woody Allen: " La única manera que te guste la vida es que te guste sufrir". Para nada esto es así. La vida es maravillosa, pero en algún momento aparece el dolor. Nos movemos en ese continuo viaje hacia la felicidad, con episodios de sufrimiento inevitables, que nos permiten y nos dan la oportunidad de reorientar nuestra vida, crecer, y evolucionar. Siempre he pensado que estos episodios de pérdidas en todos los sentidos, nos abren otras puertas que de no ser así no se hubieran abierto, además de darle el significado de una lección que necesitábamos aprender. 

Después de todo lo que te he dicho e intentando no caer en contradicciones, debo confesarte que para mí uno de los aspectos más importantes de la vida sino el más importante es: El AMOR. Partiendo de ese amor a uno mismo (si no nos amamos, no podemos dar amor a los demás), y continuando con el amor de padre/madre hacia sus hijos. Este si es absoluto, incondicional, no pide nada a cambio, y es el que yo siento por ti. Por todo ello, sufro cuando tu sufres, río cuando tu ríes, lloro cuando tu lloras, amo cuando tú amas, y lo que siempre buscaré esté yo presente o no lo esté, es que seas feliz en este mundo. 

En este viaje que llevo por este mundo me arrepiento principalmente de cosas que no he hecho, no de cosas que he hecho y que me salieron mal. Me arrepiento de no haber sido más honesto; honesto conmigo mismo, y honesto con los demás. A veces nos empeñamos en hacer uso del autoengaño y de engaño a los demás para evitar ese sufrimiento inevitable que te decía. Como te he dicho antes, no quiero darte la lección del viejo, pero si decirte que la mentira consciente, aunque sea con una causa noble, se apodera de tí y te hace peor persona. Hablando en términos morales, bastante simplistas; mentir te lleva hacia el mal, y el mal te aleja del concepto de persona que por naturaleza tiene tendencia a hacer el bien, y cuando la persona se aleja del bien va perdiendo la oportunidad de ser feliz. Por eso, mi vida, recuerda que LA HONESTIDAD con uno mismo y con los demás, es otro de los elementos que conviene que incorpores a la mochila de tú vida. Ser asertivo, decir lo que es, es uno de los aprendizajes con los que aún estoy trabajando. Aunque cueste, a uno le deja en paz con uno mismo. 

Una vez escribí que el llanto es el orgasmo de la melancolía, y así lo pienso, a veces necesitamos esa melancolía no dañina, que nos lleva a la introspección, a la reflexión, al camino del autoconocimiento, y esto te lo provocan con mucha facilidad situaciones de pérdida. 

Mi amor, no puedo vivir por ti, aunque daría la vida porque no sufrieras, pero quiero decirte que estaré aquí para cuidarte, acompañarte mientras viva, y quererte con ese amor que te decía, incondicional y libre de todo utilitarismo; mientras tanto perdóname si parte del dolor que has sentido en tú vida he sido yo el causante, y recuerda que te quiere por encima de todas las cosas. 

TE QUIERE:  TÚ PADRE.  

miércoles, 26 de diciembre de 2018

EFÍMERO PERO ETERNO

Todo es efímero; todo cambia porque el cambio forma parte de la vida. Cambia el hombre: un día es joven, pasa a ser lo que  llaman maduro, y entra sin darse cuenta en el mundo de la vejez. No hay conciencia del cambio. Todo paulatinamente se va modificando bajo la mirada del paso del tiempo. 

Hoy en la calle principal de mi amado pueblo, digo amado porque  todo el mundo que me conoce sabe que adoro a mi pueblo, su calles, sus plazas, sus jardines, su aroma a chocolate con churros, en el atardecer crepuscular de un día de otoño. La hojarasca que se amontona mientras caminas por la calle de la Reina, mientras el sol se despide dejando la huella rojiza que va hacia la noche, y el destello de los guardas con sus linternas que buscan a algún rezagado despistado antes de clausurar  mi amado jardín. 

Pues bien en la calle principal, cerca  del ayuntamiento, me di cuenta de lo que cambia la vida, en pocos años. Vi la tienda que ayudé a montar, transformada en un bazar de chinos, el balcón de la corrala de la casa de mi tía Feli (tía abuela), se hallaba desnudo, sin nadie dentro. Yo siempre observaba desde la cera de enfrente, como no podía ser de otra manera, la luz amarillenta de mi mítica tía agazapada en la silla de mimbre deshilachada, que escondía tras  la ventana. Un sitio privilegiado; mi tía controlaba desde allí "lo de dentro" y "lo de fuera", lo cálido de la casona de Feli, y la apertura al mundo desde la ventana, donde mi tía veía pasar la vida: Los Fernández; la tienda de enfrente, ya desaparecida e imagino que los dueños también. Bajo el balcón: la funeraria varón, siempre cerrada pero con los artículos de venta preparados para ser expuestos y vendidos, deteriorados por el paso del tiempo, en la misma cera la Farmacia de Eduardito, un hombre de dos metros, al que la tía le añadía "ito", no se si como ironía, o porque lo conocía desde pequeño. Pues bien la farmacia de Eduardo ya tiene otros dueños, y Eduardito murió. En la cera de enfrente, en la esquina según nos acercamos al ayuntamiento; la farmacia de "Torito"(un clásico). Al farmacéutico "Toro", le dio un ictus, y camina dificultosamente por las hermosas avenidas del pueblo. 
Zapatería Varón.

Capítulo aparte en la misma acera del balcón de Feli; antes de llegar a la esquina, se vislumbraba la "zapatería Varón"; una de las primeras tiendas de Aranjuez, y sobre todo la primera zapatería de la ribera del Tajo; un clásico. Sus escaparates decimonónicos llenos de espejuelos clásicos, vieron nacer al siglo XXI. En la guerra los Rusos, contaba mi tía, eran usuarios del comercio. El abuelo de mi tía lo fundó, su padre le dio continuidad, y con la muerte de mi tía luisa (hermana de Feli) murió la zapatería, para transformarse en una moderna óptica llena de luz y modernidad. Allí mi tía Luisa vivió el noviazgo mas largo del mundo; unos 50 años de novios, con la ilusión del primer día. !Qué cierto! mi admirado Vicktor Frank, cuando dice que la clave es dar sentido a la vida; El sentido de la vida de mi tía era esa zapatería, o más bien la trastienda donde recibía a su amor, su ilusión, o lo que fuere, cuando la tarde caía, y degustaban una merienda sencilla pero llena de magia para ellos, a base de pan, embutidos, sardinas de lata, un tomatito, eso si de Aranjuez, y una conversación alargada sobre fulanita o fulanito, quienes casaron a la hija con un Marqués, o los vecinos de enfrente que se les vio paseando al perro quien se desahogó dejando un "mojón" a la entrada de la tienda. En fin historias de la trivialidad del entorno; la crónica de un Aranjuez caduco que esperaba nuevos tiempos. 

La Favorita: La tienda que fundó mi abuelo Mariano, que luego fue Mimo¨s
Mi tienda, digo mi tienda porque aunque era de mi madre, la considero como si fuera mía, se situaba entre la funeraria, y un comercio de muebles y adornos clásicos que se llamaba "El Bazarico". Daba gusto ver las antigüedades barrocas, isabelinas, de madera buena, que se amontonaban en el bazar. Entre medias, como decía, la antigua favorita, se transformó en la tienda Mimo's, una tienda de niños donde vendíamos de todo para el Bebé; cochecitos, tronas, vestidos, pijamitas, biberones, chupetes, y todo lo que se puede necesitar en esto de la crianza de niños. Era un punto de encuentro, un centro social donde acudíamos todos en busca de llenar el tiempo, de encontrar a alguien con quien ir a tomar un café, un refugio que daba acceso a la casa de Feli. Subir arriba era una experiencia religiosa, espiritual, mítica: Mi tía era una gran conversadora. recuerdo con nostalgia los relatos que no le gustaba contar, sobre la guerra civil, pero que a mi me fascinaban: Me hablaba de la Checa que había en la casa de Atarfe (cerca de su balcón), donde contaba la tía torturaron a una mujer, y ella recordaba sus chillidos.  También me contó una matanza que hicieron en el campo de Aranjuez, y uno de los supervivientes que fue herido en el cuello, años después sacando al cristo en procesión se golpeó en el cuello, empezó a sangrar y murió frente a su balcón, en fin multitud de historias que algún día escribiré, despachaba ante mi presencia, gozando mi mismidad de su ilustre narración. 

Tío abuelo Paco, hermano de mi tía Feli, amigo
de Jose Luis Sanpedro

Capítulo especial tiene el bueno de Jose Luis (Jose Luis Sanpedro): Fue compañero de estudios de mi tío (abuelo) Paco, desaparecido en la guerra civil. Jose Luis, salió de Aranjuez al comenzar la guerra. Siempre he pensado que mi tía andaba enamorada de Sanpedro. Se movía en esa ambivalencia que tenemos los seres humanos:El respeto y admiración a su persona y a su obra, de hecho me regaló la colección de sus libros firmados, y el resquemor de que era  republicano. Mi tía era una gran Franquista, digo gran no por hacer apología del régimen, sino por la firmeza con la que defendió sus ideas, conservadoras, probablemente equivocadas, pero firmes y coherentes. Digamos que esta era la muestra racional, la verdad es que yo siempre he pensado que ese rencor amoroso procedía de sus sentimientos más profundos, que se quedaron en puertas por su marcha. 

Sorprendente; acaba de llegar mi madre. Y me acaba de soltar, que hoy es el séptimo aniversario de la muerte de mi tía abuela Feli. No tenía ni idea. Me puse a escribir como consecuencia de un paseo por mi pueblo del paso del tiempo, y el espíritu de mi tía se apoderó del duende de mi escritura. 

Tía abuela Feli de Joven. 

Estoy impresionado; impresionado porque el paso del tiempo se lleva la materia, se lleva los cuerpos, pero el espíritu incandescente del alma de mi tía, está aquí con nosotros, prueba de ello lo que os acabo de contar. 

Todo es efímero menos el alma de los que colonizaron un día nuestra mente, con sus palabras, sus historias, sus ideas, sus valores, su cariño, sus gruñidos, sus rarezas, y su olor a vida como ella lo entendía, pero vida. 

Donde estés,  recuerda que hoy estuviste en tú pueblo, en tú balcón, y te metiste en mi para escribir este relato. Besos llenos de vida, querida Tía Feli. 

martes, 25 de diciembre de 2018

LA ESPERANZA DE MIS SUEÑOS


LA ESPERANZA DE MIS SUEÑOS

- Nada es más terrible que recibir el castigo de ser ignorado. Puede que esta afirmación tenga otras aristas a explorar. Por ejemplo: Si en algún momento necesitas a alguien para ser feliz, serás su esclavo. No necesitamos a nadie para ser felices, tenemos capacidad endógena para serlo. El hombre es un "Ser Social", Ningún hombre es una isla, es un complemento esencial el otro, pero no como como un axioma "sine qua non" la felicidad no se da.

En ese exabrupto cuasi dogmático que se gastaba Tomy cuando quería provocar, colocó esa ristra  de frases hechas alimentadas por el deseo  de recibir una respuesta estereotipada por parte de Nora, pero no aparecía. El silencio del taconeo sobre la tarima del restaurante en el que habían quedado, golpeaba la mente seducida de aquel hombre por aquella melodía meliflua. Eso si era provocación, de la buena, de las que llegan al estómago, y generan margaritas de colores,  o en el mejor de los casos mariposas que chocan con las paredes de la pasión y la obsesión por el otro. 

Alguien me dijo una vez que en la búsqueda de la felicidad siempre encontramos al "otro". El otro nos cura del ostracismo al que nos arrastra el ego. El otro refleja a modo de espejo algo que tenemos que aprender sobre nosotros. Nos acompaña en el camino, compensa nuestras carencias, y lo más importante: Apoya nuestros sueños. 

Aunque mi "alter ego", también sabía que no se puede ser feliz sin ser dueños de nuestro destino. La mayor parte de nuestra vida está marcada por nuestras decisiones. Apelamos al destino como mecanismo de defensa de nuestras frustraciones, pero en realidad el resultado de nuestra vida, si lo analizamos minuciosamente, está lleno de decisiones equivocadas o no, pero que nos llevan a ser lo que somos. 

Un juego apasionante, aunque a veces puede ser inquietante, es rescatar las historias frustradas por nuestras decisiones, nos llevan a un planteamiento de ficción envuelto en neurosis, que si no lo digerimos nos conduce al final de la vida a un balance vital bastante inclinado hacia la desesperación. Por tanto las historias que no han ocurrido, no dejaron huella, porque no existieron. Pueden existir otras en nuestro presente,  que si deseamos debemos entregarnos a ellas, con el riesgo de que no salgan como esperábamos. 

No podemos controlar todas las variables que afectan al desarrollo de las relaciones, pero sí somos dueños de nuestra actitud; flexible para adaptarnos a los cambios, y viviendo como si fuera el último día de nuestra vida, y aprendiendo como si fueras a vivir para siempre. 

Este constructo en el que situamos la esencia del hombre: "como ser permanentemente insatisfecho", que quiere lo que no tiene y lo que tiene no lo quiere perder, explica el ámbito relacional del ser humano.

Esa silenciosa procesión de golpeteos en la madera con el fino tacón de Nora, que llevaban a Tomy hasta la locura, fue rota súbitamente por una frase súbita de la seductora dama: 

- Si algo pasara: "Te ignoraría como si nunca hubieras formado parte de mi vida. Evitaría verte. En la distancia las cosas se ven de distinta manera"

Nora no sabía muy bien por qué había dicho eso, pero le había salido del alma. Nora había sufrido mucho en su vida, y sabía cuál era su mejor estrategia para no sufrir, pero Tomy no aguantaría ser ignorado por su Nora, su magnífica amiga que le llevó a perder la razón, a recuperar la ilusión, a sentir de nuevo como si nunca antes lo hubiera hecho. Esa amiga que se transformó en su gran amor era la energía que necesitaba ahora para tomar las riendas de su vida.

- Nora; como siempre digo prefiero que me odien a que me ignoren. No soportaría verme rechazado por ti. Pero eso no va a pasar. Bueno como bien dices tú, a todo se acostumbra uno; pero los dos sabemos que nuestra historia tiene mucho de eternidad: "Los dos sabemos que nunca encontraremos a  nadie que nos entienda  mejor, con mutua admiración, pasión, y respeto". Esto no es fácil de encontrar, y más a una determinada edad, el cronómetro del tiempo corre en nuestra contra. No podemos dejar lo de hoy para mañanas, ya quedan menos mañanas. 

Nora sentía que algo estaba cambiando, que los ojos de Tomy se llenaban de energía cuando hablaba del cambio. Un brote pequeño de esperanza comenzó a brotar entre la sequía de la desesperación de ella. 

- Tomy: Te quiero como nunca quise a nadie.

Ella sentía que estaba ante el gran amor de su vida, aquel descubrimiento, le había llevado hasta un mundo nuevo: Un ser que le hacía sentir libre, segura, de nuevo mujer. Esta oportunidad que le había dado la vida, no podía  perderla.

- Tomy; Ya somos mayores; los amaneceres se van reduciendo, y hay que apostar por lo que quieres: Es mejor arrepentirse de lo que has decidido, que no de lo que nunca has llegado a decidir. Piénsalo, pero no puedes ser un títere en manos del miedo. 

- Ya te dije Nora, que nunca volveré a dejarme en las manos del destino; quiero ser el dueño de mi vida, quiero llevar el rumbo de mis sueños, quiero amarte como nadie te ha amado. Quiero que habites en mi vida, y tener una sola vida, en la que seamos los protagonistas de nuestro guión.

Se alejaron en la sombra de la tarde por el camino de la esperanza, cogidos de la mano, y arropados por la pasión de un nuevo día. Todo es deletéreo, efímero: el día, la noche, la guerra, la paz. Pero ellos sabían que la conexión espiritual en la que habían entrado en estos años gozaba ya de la eternidad. Nada se podía hacer estaban condenados a estar unidos para siempre. Cuando el cuerpo ya no exista, las almas de los amantes vivirán por siempre y para siempre, en la eternidad de la historia de los tiempos. 







jueves, 6 de diciembre de 2018

METAMORFOSIS Y AMOR


METAMORFOSIS Y AMOR



Bebo había recorrido un largo camino hacia la libertad, pero se despistó, se proyectó en exceso hacia el exterior, se olvidó como decía Gilda "de sus adentros". El súbitamente y con la sorpresa del niño que descubre una nueva experiencia, ante  mirada melancólica de su Gilda, había detectado las limitaciones  contradictorias y ambivalentes que dibujaban su vida.

Ella había puesto sobre la superficie la esencia aprendida de Bebo. Le dijo que siempre quería satisfacer a todo el mundo y con sus circunloquios buscando la aprobación del otro, sólo provocaba inseguridad y desconfianza. 

Bebo se quedó estupefacto, no entendía porque se comportaba así, pero reconoció con un gesto entre sorpresa y fascinación por el análisis de Gilda, la certeza de la hipótesis de la dama. Mientras tanto los ojos asépticos de Bebo se humectaban en lágrimas, y dilataban sus pupilas en busca de más evidencias. 

Por un momento se quitó la máscara protectora que usaba desde pequeño, para que no le afectaran los acontecimientos vividos, y que  a veces le transformaba en una especie de robot psicópata sin sentimientos. Era como si no le afectaran las cosas, pero la verdad es que por dentro le hervía la sangre, fluía un calor emocional controlado que erosionaba sus entrañas, que le desgastastaba, que le llevaba a una introspección personal, que le llevaba a su mundo, a sus limitaciones,  donde había vivido durante gran parte de su vida, y adonde tenía encarcelada su libertad. 

Ella le dijo que siempre había vivido atemorizado, con miedo, y es por eso que le costaba hablar con claridad. El creía que era claro, pero todo lo contrario; llevaba la ambigüedad por bandera, la precaución del que no quiere recibir un zarpazo. De repente se dio cuenta que la libertad que tanto ansiaba, la había buscado en un lugar equivocado. Salió al mundo de lo tangible, sin romper las cadenas de su mundo interior, que era lo que le impedía ser trasparente, mostrarse firme en sus decisiones, en sus pensamientos, en sus emociones, en sus actos. 

Al menos ella le había ayudado a descubrir uno de sus secretos más ocultos, le había puesto en la superficie, la clave de su felicidad: romper las cadenas de su "miedo a la libertad". No basta con abrir la jaula para ser libre, además hay que vencer al miedo a la incertidumbre, a la aprobación de los demás, al enfado del otro, al dolor del abandono. Esa era la clave que se olvidó Bebo, y que Gilda en su fluido discurso desde su cama le había mostrado casi sin despeinarse.

Bebo ese día se dedicó a reflexionar toda la tarde sobre ello. Se sentía melancólico. De repente se había llenado de esa soledad creativa, que le devolvía a la escritura, a su "mundo", que desde pequeñito había construido a base de miedos, y donde se encontraba confortable, calentito, libre; es verdad que cuando salió de él fue porque descubrió que eso no era la vida, que en el exterior estaba la realidad, pero rompió el cascarón tan rápido que se le olvidó  desatar las cadenas del miedo.

Gilda le había hecho descubrir que ese mundo exterior que había construido a base de miedo a hacer daño a los demás, hacía infeliz a los que más quería, provocaba incertidumbre y desconfianza en Gilda, y lo más importante: "Le hacía infeliz a él mismo". 

Que curioso: Media vida preparando la salida, y en la superficie se dio cuenta que el enigma estaba en su interior, en su mundo. El siempre decía parafraseando a Erich Fromm: "lo que es dentro es fuera", por eso ella le mostró  que el cambio pasa primero por dentro, y parece que Bebo no se preparó adecuadamente para la salida. 

Gilda pensaba que el lamento, sólo servía para impulsarse para el salto hacia la libertad, por eso despojó a Bebo de sus miserias, de sus entelequias protectoras que le llevaban a la desesperación, al nihilismo, al desconsuelo, a la soledad del mutismo autárquico de la soledad. 

Quizás para poder amar, pensaba Bebo, es necesario despojarse de la opacidad de su mundo, y transformarle en trasparencia compartida. Incomoda más al otro la ambigüedad que la verdad por muy dolorosa que sea. 

Gilda le había dado la lección de su vida. En tan solo 10 minutos le había desmontado las creencias de toda una vida. Bebo en un instante se dio cuenta de la laxitud de sus valores; no podía seguir así. Lo malo de dar gusto a todos es que te transformas en el esclavo de los que amas. Pero claro esa esclavitud era para Bebo el ideal de su vida, era el esquema con el que había funcionado desde que salió del cascarón. Ahora que era consciente, tenía la oportunidad de liberarse sin ninguna duda de lo que le había hecho infeliz durante todos estos años. 

Esto no es opcional, pensaba Bebo, no tenía más remedio que dar un giro de 360º, y volver a empezar, soltar las amarras que le impedían el despegue hacia una nueva vida, una vida de amor, de trasparencia, de pasión, de ausencia de miedo, de libertad. 

Es entonces cuando le dijo a Gilda: 

- Gilda hoy he vuelto a nacer. Quiero ser el protagonista de mi vida.  No quiero navegar sin rumbo, Voy a ser el agente activo de la búsqueda de mi felicidad: ¿Quieres estar a mi lado?.
- Querido Bebo: Siempre he estado a tú lado, te amo, y estaré siempre contigo. Eres la persona que más he querido, y siempre lo serás, pero no puedo seguir así. 
- Gilda, no te puedo pedir nada, no tienes ningún compromiso conmigo, excepto el amor que nos une. Es la última vez que te voy a pedir esto: confianza, porque si fracaso en este último intento, no te decepcionaré a ti; será la decepción de mi vida, y entenderé que no tengo solución. 
- Bebo; estaré contigo, te acompañaré en silencio; pero tienes que prometerme algo: Se trasparente como el viento, no te dé miedo a la libertad, no temas hacerme daño, comparte conmigo tú mundo, y se feliz. 

Bebo se mantuvo en silencio durante unos minutos, mientras su mente se cargaba de energía; volvía a tener esperanza...se estaba llenando de pasión, de consuelo; se había liberado. Había descubierto que para poder amar a Gilda, tenía que librarse de las cadenas de sus miedos. 

- Gilda; Voy a luchar de nuevo por nuestra felicidad. Comienza mi metamorfosis, comienza mi nueva vida, quiero volver a ser "Yo", esa persona que inyecto esperanza y pasión en tú vida, ese Bebo que te apasionó, al que admirabas, al que adorabas, en el que te apoyabas, en el que vislumbrabas un futuro mejor. Espero recuperar a esa Gilda apasionada del relato "Eres mi Dios". Mientras tanto Gilda; quiero que sepas que has sido mi luz, mi impulso, y y espero volver a ser lo que era para seguir amándote hasta el final. 

Empezaba una nueva historia, un nuevo episodio en sus vidas, un nuevo proyecto  que impulsó un día el amor, lleno de esperanza, sinceridad, y vida. 

Bebo y Gilda unieron sus manos, y se fundieron en un abrazo apasionado, que firmaba un nuevo pacto de amor y entendimiento: Bebo volvía a reconstruirse sobre sus cenizas. Gilda estaba a su lado una vez más.