lunes, 16 de junio de 2014

GILDA: UN DESEO EN LA TRASTIENDA.

 
 

Aquella historia no era como las demás, aunque como pensaba Bebo: “Nunca se repite la misma historia”. Recordaba Bebo la frase de Chantal: “Lo que no tiene límites, y por tanto es infinito, asusta: porque no sabes por dónde cogerlo. Pero sin embargo es lo que da permiso a abrir nuevas fronteras”. El miedo a lo infinito, a nuestras propias cortapisas, a las imposiciones culturales, sociales, emocionales, son nuestras únicas limitaciones. Gilda andaba buceando y explorando el infinito cuando de repente se topó con Bebo: Se miró en su espejo, derramó un par de lágrimas, y continuó el viaje liberada de carga…
-          ¡Me has devuelto la inspiración!,-   dijo Bebo, con ese tono grandilocuente que a veces usaba como arma de provocación. Bebo era un provocador nato, puede que hasta reaccionario. Le gustaba estimular a las mentes que le seguían, para poder destripar y analizar sus reacciones, a veces contradictorias y ambivalentes.
Siguiendo con la frase  de Chantal; explorar el infinito es descubrir zonas pastel, oscuras, y grises, que desconocemos pero que nos abren las puertas de nuevas sensaciones.
Pero volviendo al tema que nos ocupa: Bebo encontró en Gilda ese eslabón perdido de la feminidad ecléctica; aquella que apunta sutilmente hacia estilos diversos. No sabía muy bien si aquello era una proyección volitiva, o formaba parte de la realidad. Lo que estaba claro es que  un deseo permanentemente buscado por Bebo: era lo original, lo “No clasificable”; como él decía “soy un outsider”: Ser un outsider provoca ambigüedad social, pero te da un punto de libertad que te permite limpiar de prejuicios esa exploración del infinito.
-          Si Gilda; recuperé esa escritura que procede de mi profundidad, de mi esencia, y a veces de mis caprichos y sutilezas de mi ego. Tú aparición en escena me liberó de la alienación donde mi mente estaba aprisionada. Perdí el control y ahora lo he recuperado.
-          No sigas Bebo…Me has ayudado mucho, me has liberado del ostracismo en el que me encontraba. Estaba esperando un cambio, pero no sabía que el principio del cambio comienza por uno mismo, y mi dedicación a los demás postergaba mi evolución para tiempos mejores. He podido descubrir junto a ti una senda por la que seguir, construida por mí; mi obra, mi creación, mi vida; donde las personas que quiero tengan su espacio, pero el sendero es mío.
 
Bebo tomó de la mano a Gilda y secando con las yemas de sus dedos dos lágrimas cálidas que rodaban hacia su barbilla, lanzó una frase de las que a ella la hacían pensar…
-          Siempre he buscado a alguien como tú, con quien compartir una vida propia; alguien a quien amar con calma, mientras mi otra vida se aleja. Alguien a quien esperar, mientras las mariposas de mi estómago susurran su nombre.
Gilda; que seguía impactada por el derroche de emociones que allí se estaba fraguando; sólo pudo abrazar a Bebo, mientras devoraba su boca como salida  de la pasión que había contenido durante todo este tiempo de espera.
Mientras Bebo tomaba aire, aprovechando que Gilda replegaba su lengua y la condenaba al reposo, pudo decir:
-          He descubierto en estos años que todo es posible con amor, que la libertad es una cuestión de vencer los miedos paralizantes, que provocan nuestras propias contradicciones. He descubierto, querida Gilda, que se puede ser de otra manera; no es obligatorio tender hacia lo convencional, aunque si es lo más recomendable para evitar el rechazo. Aprendí a estar vivo; a sentir la pasión sin límites; a usar el sexo como canal de máxima comunicación con mi amada.
-          Ya Bebo pero: ¿Qué buscas en mí?, ¿Buscas complementar tus carencias?, ¿Buscas amor, afecto, comunicación, deleite intelectual?: ¿Ha sido un encuentro cuando no lo esperábamos, del amor de nuestras vidas?...
-          ¡Para Gilda!: Alguien me dijo una vez: “Sólo existe un amor en la vida de una persona: Los más afortunados lo encuentran, pero la mayoría se pasan su vida buscándolo”. Por mi parte yo sólo puedo decirte en este momento que  pase lo que pase; yo siempre estaré impregnado de ti. En el centro de mi corazón tienes un territorio que lleva tu nombre.
 Ante un silencio reflexivo, tomaron el coche gris de Gilda, y se desplazaron a un lugar oculto; un lugar frondoso, lleno de naturaleza. Cantaba un búho, mientras la luna iluminaba el rostro de los amantes cogidos de la mano, cuando ambos competían por romper el silencio…
-          Gilda: ¿Me amas?- preguntó él, intentando explorar los sentimientos de Gilda.
-          ¿Amarte?: No lo sé; ni siquiera sé lo que es el amor… ¿Un invento del ser humano?. Solo se lo que siento: Te deseo, te adoro, se para el tiempo cuando estoy a tu lado, tus besos me electrifican, me hacen temblar, me entregan a ti, me descontrolan. Te admiro tanto que podría estar besándote durante días. Es  algo tan especial lo que siento por ti, que un huracán se ha llevado algunos pensamientos e ideas que han sido la base de mi existencia hasta ahora. En este momento todo mi ser está invadido e influido por ti: ¿Eso es amor?, ¿es cariño?, ¿amistad?, ¿deseo?; da igual como quieras llamarlo: ¿Cambia algo el nombre que le pongas?.
 
Un silencio valorativo, se apoderó del rostro de Bebo, mientras alzaba la mirada hacia al cielo, y comenzaba a incrustar sus carnosos labios en el cuello de Gilda, cuando ella suspiraba y le  susurraba al oído: Te quiero cariño, Te quiero.
Un frescor incandescente invadía el cuerpo de ambos, en contraste con el calor que brotaba de sus entrañas, llenas de pasión que fluía por su piel. Bebo desplazó sus manos a los senos de la dama, mientras ella se contraía estimulada por sus caricias; tomó el sujetador de encaje negro que aprisionaba su escote que tanto le excitaba, y liberó a aquellas dos enormes pasiones de la presión, y empezó a reanimarlas a base de lamidos con pequeños mordisquitos en sus pezones.
Un intenso deseo se derramaba por sus cuerpos, cuando ella en un intento de satisfacer los deseos de Bebo le dijo con una  voz pasional, muy sensual y femenina:
-          Déjame que te chupe-
 
Gilda que estaba apoyada en su coche, se retiró unos centímetros del maletero donde Bebo le había sentado, ella le empujó suavemente, y empezó a acariciar su entrepierna mientras notaba como el sexo del caballero incrementaba su tamaño, fue entonces cuando se puso de rodillas, y sacó  lo que estaba ansioso por salir. Se lo introdujo en la boca, notando un inmenso calor que llenaba de fuego todo su cuerpo. Lo chupó hasta sentir la punta en su campanilla, mientras Bebo  se moría de placer.
La lengua de Gilda recorrió minuciosamente cada uno de los puntos del sexo de Bebo, con mucha suavidad, hasta que él la levantó y la apoyó sobre la parte trasera del coche:
-          Dame fuerte- espetó ella, mientras se derretía de ganas de ser penetrada.
Bebo introdujo su gruesa verga  en la vagina de Gilda retirando sus braguitas negras, mientras ella chillaba de gusto. El  amarró su curvilíneo culo y empezó a galopar intensamente, notando como se  incrementaba el flujo en su entrepierna, tanto es así que notó una lluvia súbita de flujo que empapó  a los dos; había sido ella que había llegado al orgasmo. Al segundo empezó a convulsionar acompasadamente, mientras varias descargas de placer ponían sus ojos en blanco. Estuvo así unos treinta segundos, y sólo pudo decir:
-          Cariño: ¡Ha sido muy intenso!, gracias.
Gilda terminó con su lengua lo que había empezado.
-          Cielo; Me gusta sentirme poseída; me dejo llevar, te entrego mi cuerpo, y cuanto más fuerte me das, más me excito y más placer siento.
-          A mí también me gusta someterte, controlarte, es como una batalla de placer, como domar a una yegua.
 
Bebo pensó en la razón por la que le gustaba a Gilda ser sometida:
-          Cielo; ese deseo anhelado de ser protegida, de ser cubierta por el macho, procede de nuestro cerebro más primitivo, del “Cerebro Reptiliano”. Es un deseo frecuente en  las mujeres.
 
-          Tengo un sueño espantoso que quiero contarte, a ver qué opinas: Me observo en la pierna una pequeña incisión por la que sale un gusano tremendo, me doy cuenta que estoy llena de gusanos y que uno de ellos va el corazón y se lo come.
 
-          Gilda; me parece que el gusano ha devorado tu capacidad de amar. Los desengaños, frustraciones y heridas que te ha dejado la vida (los gusanos); han destrozado el órgano del amor (el corazón); Ahora Gilda desconfías de todo, no esperas nada, has perdido la esperanza…Creo que la fase en la que estás ahora es la de: “Trasplante de corazón”; un paso que te llevará desde la inapetencia y falta de interés, desde la falta de sentimientos, a ver latir de nuevo la ilusión, la vida, la pasión, y la esperanza.
 
-          Puede ser, cariño: Creo que me estás trasplantando un nuevo corazón, y estas aniquilando a los gusanos.
 
-          Bueno Princesa, si lo crees así, puede ser el comienzo del cambio; Pero he de decirte algo que a mí  me parece importante: Al final estamos solos, somos los dueños de nuestra vida, la responsabilidad es nuestra, de nadie más, de no ser así habría que pedir responsabilidades de nuestra vida a los demás, pero somos nosotros mismos los que construimos lo que somos. Por eso te digo mi vida, que la Autonomía y la Libertad están por encima del amor a los demás; se libre como la brisa del mar que tanto te gusta, acaricia tus deseos y si puedes hazlos realidad, y con esa premisa serás tú misma, y quien te ame te amará así, tal cual eres.
 
-          Me fascina y me da vértigo a la vez esa libertad tan absoluta de la que me hablas. Me he contenido tanto, he vivido tantas vidas ajenas, que casi se me olvidó que existía; estaba mimetizada con el entorno, como un objeto de felicidad y placer hecho para los demás.
 
-          Lo se mi vida; ahora es tu momento, tu oportunidad, es hora de tomar conciencia. La felicidad Gilda, no es un ideal de la razón, sino de la imaginación. El tomar conciencia te impregna el cuerpo de creatividad. No te olvides que creamos nuestros momentos; crea el tuyo propio.
 
-          Siempre he sido muy responsable, miedosa, adicta a los afectos de los demás.
 
-          Gilda cuando cambias la forma de mirar las cosas o las personas, las cosas cambian. Todo lo que pensamos lo atraemos a nuestra mente, y esta nos hacer ver las cosas de una forma determinada, y nuestros actos, conductas, y actitudes, hacen que todo tenga una u otra dirección en función de lo que te digo.
 
-          ¿Quieres decirme; que he visto todo del revés?.

 

-          No, lo has visto en función de los deseos y necesidades de otros. Ahora es el momento de que brilles con luz propia; eres una luciérnaga que nunca ha usado su luz.

 

-          Lo haré mi amor; tengo una única vida y  a partir de hoy voy a empezar a vivirla, te lo aseguro.

 

Los dos amantes sabían que empezaban una nueva etapa, con la ilusión del que empieza, con la pasión del que  ama, con el deseo de vivir como si fuera el último día de su vida, y en aprender como si fueran a vivir para siempre.

 


3 comentarios:

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  2. Gilda...cuantas gildas habra por ahi....
    Una historia muy real..
    Me ha parecido leer en estos dos escritos de Gilda un diario personal...
    Muchisimo mejor redactado por supuesto...
    Yo no sabria explicarlo y mucho menos con esas palabras...solo un buen escritor podria...y para mi, tu lo eres...facil de entender..sin rodeos..muy claro..sin diccionario al lado, para poder descifrar lo qye significan ciertas palabras, que para mi, aunque me guste mucho leer, hay muchas de ellas que no se lo que significan..
    Miedo a ser una misma, a sentirse viva.. a defraudar a su gente, a sentirss egoista, a no entender por que ahora?,..
    Puede ser que a esta edad..cuando vas viendo que tu vida pasa, que te sientes vacia, que todos tus sueños e ilusiones ,se han quedado atras, y que si no luchas por ellos ahora, cuando?..
    Las prisas por poder ser por fin uno mismo, por vivir sin esos tabues, sin esos prejuicios, que desde pequeño te van metiendo, donde el placer, la pasion, el sexo en general era pecado, exceptuando para concebir claro esta. Y a lo que la mujer no tenia derecho a sentir.
    Todo esto y mucho mas crea una ansiedad en la vida que te ca enfermando, y no entiendes por que te pasan ciertas cosas, por que esos cambios de humor, por que un dia te levantas sin motivacion, con una gran apatia, con ganas de llorar continuamente, y asi hasta que un dia no puedes levantarte y ya te diagnostican una gran depresion, y te atiborran de pastillas, y hasta la proxima...asi años y años,,hasta que un dia decides decir basta, basta ya de tantos prejuicios, de vivir al gusto de los demas, de qye todavia estas viva, y qye puedes sentir, amar, desear, gozar, lo que tu desees,, no lo que los demas quieren que hagas,..
    El problema de este despertar es como lo haces sin daños colaterales como bien dices en tu segundo escrito de Gilda. Como no sentirse egoista , por mirar casi pir primera vez en la vida por uno mismo?
    Ese remordimiento a veces es peor que seguir viviendo como hasta ahora . Y te sientes atrapado , perdido, desesperado, y enfadado por descubrir, que has estado viviendo una mentira , y que probablemente seguiras viviendo asi.
    Mis felicitaciones con Gilda, me encanta lo que la esta pasando, y como esta disfrutando esta pasion con Bebo, que sea por fin ella, que viva para ella, para sus deseos sexuales y no sexuales, para lo que la plazca y apetezca,,que se sienta deseada, que se sienta admirada, que se sienta viva, que se sienta mujer, que se sienta LIBRE,
    QUIZAS SEA NECESARIO PONER UN BEBO EN LA VIDA
    Saludos, y espero seguir esta historia, gracias por compartirla

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  3. Gracias Bea; siempre es un placer tener lectoras como tú, que les llegue el mensaje que quiero mandar. Claro que hay Gildas esperando que llegue su Bebo, y Bebos esperando que llegue su Gilda.

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