domingo, 13 de enero de 2013

EL PAÍS DE LA ESPERANZA III



Mi paso por Iracusa y por calma, fue emocionalmente intenso.  Pude encontrar el amor y le tuve que destruir con mis manos por  un supuesto bien común, pensé  que en realidad a veces así es la vida, tenemos que dejar personas y cosas por un  deber superior. Aunque no paraba de acordarme de Ira; me quedaba el recuerdo, la nostalgia, su olor. Sentía  un vacío por dentro que destilaba melancolía, pero también pensé que debía ser  así: Nada es para siempre, me dije. Todo muere, y a la vez nacen circunstancias  nuevas que nos ofrecen oportunidades que podemos  aprovechar, rechazar, o ignorar.
Hacia la colina de las Luciérnagas me dirigía, recordé que era el objetivo que me marcaron los pintores de la biblioteca, era allí donde encontraría el camino, al templo de la vida, y a Lady Leben. Sería allí donde terminaría este viaje y empezaría una nueva vida.
Caminaba y cada vez sentía más fuerte la vibrante luz de las luciérnagas, en cada paso notaba como un calor luminoso procedente de la colina que calentaba mi cuerpo, percibía ese crepitar de la luz intensa que emitían aquellas criaturas que configuraban un sendero perfectamente definido que moría en un castillo. Caminé con ansia por llegar a la base de la colina, con el desasosiego lógico de aquel que busca algo, y lo percibe en  lontananza a tan solo unos supuestos metros.
Comencé el camino, y empecé a ver en cada  luciérnaga a almas que habían pasado por mi vida y ahora no estaban. Mis abuelos me recibieron con una luz especial, casi me deslumbraban: Me dieron valor  para tomar decisiones. Lo tomé y lo introduje en la mochila.
Mi padre brillaba por allí, no me producía miedo como en otras ocasiones, me dijo algo que me dejó estupefacto: “Ama con toda tu fuerza, y vive como si cada día fuera el último día de tu vida”. No me lo esperaba, pero fue precioso: Me entregó otro regalo con contenido amoroso que guardé en mi mochila mientras mis ojos eran un mar de lágrimas.
Más adelante, me topé con el alma de una tía abuela mía muy especial, estaba al  lado de sus hermanas: Ella me dijo algo que tuve que pensar. “Nada es tan importante como la vida, si vives pensando que la vida es una batalla, te centrarás en la ira, olvidaras la bondad,  y perderás tu capacidad de amar”. Qué reflexión tan buena pensé;  La vida no es ninguna batalla, realmente ¿por qué nos peleamos?: por dinero, por tener lo que no  tenemos y otros tienen, es más elocuente y sensato centrarte en  ser feliz, acompañado de las personas que amas. La vida es un camino con dificultades que debes salvar, pero nunca debes perder la capacidad de amar.
Avanzando por el sendero, entre la luz y el calor de las luciérnagas rememoraba mi vida:   mi experiencia, mi dolor, mis miedos, mis fantasmas; mis errores, mis aciertos. Me encontré con un profesor, que me decía: “Es mejor arrepentirse de lo que haces que de lo que nunca has llegado a hacer”. 
Llegué hasta la última luciérnaga, y supuse que la puerta inmensa en la que me encontraba era la del Templo de la Vida; Llamé unas cuantas veces, hasta que me abrió un mayordomo impecablemente vestido y engominado; me dijo que Lady Leben me estaba esperando.
Mientras me acompañaba a la sala de visitas del templo,  pude contemplar la grandiosidad de las paredes decoradas con simulaciones en oro de hiedras frondosas. Llegamos a la sala  y el mayordomo anunció  a Lady Leben mi presencia.
-  Pasad, mortal… has llegado a tu destino.
Aquella mujer; me recordaba a la Dama de la biblioteca, yo diría que era la misma, pero no me atreví a preguntarle.  Me sentí muy satisfecho, como a quien le liberan de una terrible carga. Lady leben, se encontraba  apalancada en un enorme sillón de terciopelo rojo, al lado de una chimenea, donde el crepitar de dos troncas de roble rompían el silencio reinante en el templo.
- Hola Señora: Los pintores me mandaron aquí.
- Lo sé, no temas, saldrás renovado.
- Daremos un  repaso de determinados preceptos sobre los que debes reflexionar, y llevarlos a un cuestionamiento práctico que permita mejorar determinadas sensaciones:
1. Los problemas forman parte del ser humano. Tú cerebro es tuyo y puedes usarlo como quieras. Eres tú el responsable de lo que sientes, y sientes lo que tus pensamientos te dictan. No lo olvides, puedes aprender a pensar de forma diferente sobre cualquier cosa. Por tanto deja de asumir condiciones que te han atribuido los demás, la cultura, tu entorno, y sé lo que quieras ser, piensa como quieras pensar, y siente  como quieras sentir.
2. Echas la culpa a las circunstancias de tus desgracias, cuando la mayor parte de lo que tú llamas desgracias las has provocado tú. Es hora de liberarse de esta losa que no te permite avanzar. Crea tú las circunstancias que quieras, generalas y avanza.
3. ¿Necesitas que los demás te recuerden lo bueno que eres?: Cuando hayas reconocido lo que vales, no tendrás necesidad de que los demás refuercen tus cualidades y valores. Debes amarte a ti mismo, para poder amar a los demás. El amor propio no exige el amor de los demás, es una apreciación interna, no tiene que ver con los puntos de vista de los demás.
4. Hay cosas que no te gustan de ti mismo que hacen que no te ames, y continuamente te quejas de ellas. En lugar de quejarte empieza por cambiarlas.
5. Abandona la envidia, considerarla como una forma de traicionarte y hacerte de menos a ti mismo al compararte con otra persona y pensar que eres inferior.
6. La aprobación de los demás se constituye como un elemento inmovilizador, cuando se convierte más en una necesidad que en un deseo. Es imposible vivir con la aprobación total de todo el mundo. Te transformas en un esclavo de los demás, si necesitas el refuerzo de la gente, o de una persona en concreto. La búsqueda de esa aprobación inhibe el cambio.
7. Romper con el pasado implica ciertos riesgos, estás seguro en el terreno que conoces, en el margen de tus ideas y tus autodefiniciones de ti mismo. Rompe con el pensamiento de: “Yo soy así y no puedo evitarlo”, sustituye esa idea por: “Así era yo, y puedo cambiar lo que quiera de mi, si lo intento”.
8. El amor: lo encontraste con Ira, y se fue por donde vino. EL amor es así; uno no decide a quien amar, pero si decide cómo comportarse y aprovechar cada segundo mientras el sujeto amado está presente:” Ama como si fuera el último día de tu vida y cuida a tu amor como si fueras a vivir para siempre”. Cuídalo, respétalo, riégalo, reinvéntalo, abraza la locura de la pasión con calma pero de forma enérgica e ilusionada.
9. Bueno, en tu mochila llevas “perdón”. Es  importante perdonar, el rencor es un lastre que cosifica al ser humano, lo  deshumaniza, lo convierte en un alma castrada, en un resentido con el peso del odio. Perdona y olvida, por ti, no por nadie más, y recuerda que: “El que no perdona no ama”.
10. El dolor y la esperanza son ingredientes que debes considerar siempre en tu vida: El dolor es inevitable a veces, pero la actitud con la que te enfrentas al mismo es la libertad última que tiene el ser humano,  en esa actitud influye de forma determinante la esperanza en un futuro mejor, si puede ser sin dolor.
- ¡Oh!: diez magníficos puntos para aplicar en mi vida.
- Bueno, con que cumplas poco a poco cada uno de ellos llevarás un camino digno, que te acercará a la felicidad.
- Ahora vuelve por dónde has venido, regresa a tu mundo e inicia una nueva vida. Ve a la biblioteca y vuelve a la vida.

Él  tomó su mochila desgastada por el viaje, y  Lady Leben le mostró la puerta por donde regresaría a su nueva vida, a su nuevo camino, con armas suficientes para buscar con esperanza la felicidad. 
Conmovido por los consejos de L.Leben, y mi paso por Esperanza, me dispuse a partir para llegar cuanto antes a la biblioteca y  reiniciar mi vida normal. Me di cuenta que era otra persona, más abierta, más tolerante, con una mayor capacidad de amar, todo esto me llevó a considerar mi conducta hasta ahora un tanto mezquina, y en mi mente aún quedaba la ilusión de un amor apasionado que me dejó su huella, y que me hizo ver que lo más importante en la vida es poder amar a alguien y ser correspondido, eso no lo puede cambiar nadie, está por encima de esa persona incluso, lo que sentí por ira aún lo siento, y la nostalgia de aquel amor me hace más humano, más libre, más solidario; en definitiva más persona.                     

4 comentarios:

  1. estaba deseando leer el desenlaze y la verdad es que ha merecido la pena esperar..
    Gracias Tony por compartirlo conmigo.
    Me ha hecho pensar mucho hasta el punto de leerlo desde la primera parte.
    Quiero decirte que voy a tener en cuenta todos los "consejos" de tu mochila..me parecen imprescindibles para esta vida que tenemos..
    Aunque yo creo que pensar en ese amor que no pudo ser y que aun se sigue queriendo te hace ser una persona triste al menos yo me sentiria asi porque para mi el amor es el motor de mi vida y aunque tenga amor de mi gente sabes que esta ese amor pasional ese amor que solo se puede realizar con la persona que el corazon te dicta...ese amor que hace que te pongas guap@ todis los dias para el....ese amor con el que sueñas de pequeñ@ y que esperas con ansiedad que llegue.
    Para mi amar a alguien y no ser correspondido es muy triste y aunque tratas de llenarlo con el amor de la familia...amigos..siempre estara ese espacio vacio que solo una persona puede llenar.
    Espero seguir leyendo tus cuentos o reflexiones
    y se que esta ultima trilogia la leere mas veces para recordar esos sabios e importantes consejos..
    Un saludo y un beso.;-))

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  2. Gracias, creo que esos consejos de mi mochila, me están ayudando también a mi, y quería compartirlos. Comparto tú visión: El amor no correspondido es muy doloroso, pero lo que no puede ser....mejor dejarlo aparcado en el camino y a seguir la búsqueda y el camino. En fin Bea, muchas gracias por leerme y por tu fidelidad... y si te aporto algo me siento alagado.

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  3. gracias a ti...y claro que me aportas...;-))

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